Parque
natural da Arrábida
El Parque Natural da Arrábida
tiene 35 kilómetros
de largo y casi 11 mil hectáreas,
repartidas por los municipios
de Setúbal, Palmela
y Sesimbra, extendiéndose
desde el monte de Palmela al
Cabo Espichel.
Esta área destaca por la
relevancia paisajística
y se caracteriza por la presencia
de espécies de la rara flora
macronésica. Es el único
local conocido de la amenazada
convolvulus fernandesi y alberga
una importante colonia de murciélagos.
Integra tres reservas botánicas
y paisajísticas: la más
importante es la Reserva do Solitario,
pero está también
la Reserva Integral de la Mata
Cubierta y la Reserva dos Vidais.
También la reserva zoológica
del Ilheu da Pedra da Anixa, en
la pequeña ensenada de la
playa del Portinho da Arrábida.
Alrededor de ese islote existe
una rica comunidad marina, con
erizos, estrellas de mar, esponjas,
corales y holoturias.
Están presentes 110 especies
de peces en los alrededores. La
zona integra el área del
recientemente creado Parque Marino
de la Arrabida, que empieza junto
a la Playa de la Figueirinha y
va hasta el Norte del Cabo Espiche.
Contiene zonas de protección
total, en la que está prohibida
cualquier actividad de pesca.
De vuelta a tierra, las especies
vegetales del parque están
distribuídas de acuerdo
con la orientación de las
vertientes de la sierra y la composición
geológica del terreno: pinos
bravos y mansos, adernos, folhados,
zambujeiros, medronheiros, aroeiras
y palmeras enanas. Existe también
una importante concentración
de robles en las matas del Solitário,
del Vidal y de la Coberta.
En la vertiente meridional de
la Sierra de la Arrábida,
la costa está cortada por
roquedos y playas de arena, como
las de Galapos y de Creiro, en
los dos flancos del Portinho.
Junto a la pequeña ensenada
del Creiro se ven interesantes
ruínas de una fábrica
romana de salazón de pescado
y un balneario.
No mucho más lejos se sitúa
la gruta, la Lapa de Santa Margarida,
a la que se accede por una vereda
de tierra batida a partir de la
carretera que desciende hasta el
Portinho.
El camino es ingreme y la vegetación
claramente mediterránea:
algarrobos, olivos salvajes o
acebuche, murta, pinos de alepo
y algunas especies espinosas, como
los cactus.
La gruta es grandiosa y está repleta
de estalactitas, con una enorme
cúpula sostenida por grandes
pilares calizos. En su interior
existe una capilla con el mismo
nombre: el culto a Santa Margarida
se festeja el 20 de Julio y este
es uno de los locales de romería.
Al final de la visita, se puede
salir de la caverna por el mar,
rodeando los pilares que sujetan
la bóveda.
Un poco más arriba, se
sitúan dos conjuntos amurallados
del Convento Velho y del Convento
Novo.
En el Convento Velho se encuentra
la Capilla de la Memoria, la Capilla
de Santa Catarina y la pequeña
Ermita de Jesús. En el Convento
Novo, que es de mayores dimensiones,
las construcciones conventuales
están implantadas en plataformas
amparadas por muros de soporte.
Un poco más arriba, se sitúa
la Capilla do Bom Jesús.
En el exterior del recinto amurallado
están las capillas de São
João do Deserto y de São
Paulo y también varias ermitas
dispersas por el costado.
El convento normalmente es el
centro de peregrinación
en las Fiestas de Nossa Señora
da Arrábida, a finales de
Julio, tradición que se
remonta al siglo XIII.
Frente al mar, defendiendo la
playa del Portinho y el Convento,
está en un polígono
hexagonal, el Fuerte de Nossa Senhora
da Arrábida.
Cabo Espichel
A este lugar, una planicie solitaria
en el extremo poniente del Cabo
Espichel, se llega desde Sesimbra.
Los peñascos y eriales
están bien preservados y
esta es la zona de paso de muchas
aves migratorias.
Impresionan los altos acantilados
con grandes zonas calizas. Por
aquí anduvieron los dinosaurios,
de los que quedan vestigios en
la Pedra Mua y en la Enseada dos
Lagosteiros.
Aprecie el bello Santuário
de Nossa Senhora do Cabo, una obra
del barroco, con su extensa planta
en formato de “U”. Y también
la Ermita da Memoria. Se trata
de un raro ejemplo de santuario
de peregrinación religiosa
planificado de raíz, con
una notable concepción plástico--escenográfica.
Otras Visitas
Se deben visitar el Museo Oceanográfico,
en la Fortaleza de Santa Maria
(Arrábida), la localidad
de Vila Nogueira de Azeitão,
así como otras pequeñas
aldeas que esconden calles empinadas,
casas típicas y algunas
ermitas.
Também se puede visitar
el nuevo Museo dedicado a Sebastião
da Gama, poeta da Arrábida.
Cerca del mar, merece ser visitada
la Reserva Botánica de las
Dunas de Tróia, en la que
se concentra una flora y una fauna
muy particulares.
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